¿Conoces la importancia del Consentimiento Informado para tu centro de estética?
¿Tienes dudas o estás buscando información sobre los consentimientos informados para tu centro de belleza?
- Sabes que su uso es necesario en negocios de estética como el tuyo.
- Quieres empaparte de toda la información posible para hacer las cosas bien: qué son, cómo crearlos, qué datos deben incluir, cómo utilizarlos, etc.
- Eres consciente de que te pueden evitar muchos problemas en el futuro.
Por experiencia propia en Avanxel sabemos que -en ocasiones- es fácil pasar por alto el uso de estos formularios de consentimiento informado en el día a día. Y esto puede ocurrir por diversos motivos como, por ejemplo, que nos parezcan obvias algunas contraindicaciones o que creamos que las personas que se van a hacer un tratamiento ya tienen suficiente información.
Y es que, por muy sencillo o complejo que sea el tratamiento al que se someta a un paciente, la importancia y el aumento de la atención por parte del profesional debe existir siempre, y esto no excluye la parte legal.
De esta forma, aparece el Formulario de Consentimiento Informado, donde se indican varios puntos que sirven para garantizar la máxima seguridad jurídica para la profesional de la estética y la transparencia de los riesgos para el paciente o su representante legal.
En este artículo te vamos a ayudar a entender qué es, cómo crear este formulario y cómo aplicarlo de forma correcta para que estés cubierta y no tengas ningún problema.
Contenidos
¿Qué es el Consentimiento Informado?
Si alguna vez te han hecho alguna prueba médica o intervención, seguramente has tenido que firmar un papel. Ese papel que mucha gente se toma como un mero trámite burocrático es en realidad muy importante.
El consentimiento informado tiene que ver con varios derechos centrales en el ámbito de la asistencia sanitaria, como son el derecho a la información y el derecho a la autonomía del paciente.
Cuando hablamos de consentimiento informado de lo que estamos hablando es de que el paciente, tiene derecho a decidir sobre los tratamientos, pruebas o intervenciones que vaya a recibir.
Esto significa que el que decide si se hace o no una prueba, si se opera o no, si se somete o no a un tratamiento, es él.
Tiene sentido, teniendo en cuenta que se trata de su cuerpo y de su salud. ¿No?
El paciente tiene derecho a que le expliquen, como mínimo, la finalidad y la naturaleza de la intervención, los posibles riesgos en caso de que los haya y sus consecuencias.
Y como el paciente no es médico o profesional de la estética, debe otorgársele una información adecuada y comprensible. Esto también tiene mucho sentido ya que difícilmente el paciente va a poder decidir sobre algo que no entiende.
Sólo una vez que el paciente tiene toda la información y está debidamente informado, puede valorar las distintas opciones que haya y dar su consentimiento libre y voluntariamente.
Es decir, que diga sí, si verdaderamente quiere decir que sí. Y que diga que no, si no quiere realizarse la intervención o tratamiento.
Como esteticistas profesionales nos conviene dar esa información a los clientes de una forma lo más clara posible, para protegernos de ciertas situaciones.
En función del tratamiento que realicemos, el paciente tendrá que cumplir con algunas indicaciones para:
- No poner en riesgo su salud.
- Conseguir los resultados esperados.
De esta manera, si –habiendo entendido y firmado el consentimiento informado- incumple alguna de estas indicaciones, no tienes por qué ser responsable de las consecuencias de incumplirlas.
Finalidad del Consentimiento Informado
La finalidad esencial del Consentimiento Informado es asegurar la comprensión, por parte del paciente, de los riesgos potenciales de los tratamientos estéticos, además de confirmar su consentimiento previamente.
Un Consentimiento Informado bien diseñado asegura, desde una perspectiva legal, que el profesional sanitario ha proporcionado suficiente información y seguirá un procedimiento adecuado para realizar el tratamiento.
Desde una perspectiva de salud, asegura que el paciente, habiendo recibido toda la información pertinente sobre el tratamiento, acepta asumir cualquier riesgo relacionado con el tratamiento.
Además, un Consentimiento Informado también asegura que el profesional médico esté al tanto de los objetivos, preferencias y opiniones del paciente sobre el tratamiento, y del grado en el que desea y es capaz de colaborar.
¿Quién está involucrado en el Consentimiento Informado?
El Consentimiento Informado incluye tres partes involucradas:
La profesional esteticista
Su principal responsabilidad es asegurar que el consentimiento esté documentado de forma correcta y que el paciente entienda todos los elementos legales y médicos asociados al tratamiento.
El paciente
Su responsabilidad es asegurar que entiende todos los riesgos potenciales relacionados con el tratamiento. Si tiene alguna duda, debe preguntar a la profesional.
Los terceros
Los terceros, como los proveedores de seguros y otros proveedores de recursos, deben certificar que la información brindada al paciente apoya la decisión acordada.
Beneficios del Consentimiento Informado para los centros de estética
Los Consentimientos Informados pueden proporcionar beneficios claros para los centros de estética, como:
- La información aumenta la cohesión entre el paciente y la profesional.
- Mejora la comunicación entre el paciente y la esteticista.
- Asegura que el paciente comprenda bien los riesgos del tratamiento.
- Ofrece al centro una protección legal.
- Reduce el riesgo de demanda por negligencia.
- Asegura que el centro cumpla con los estándares mínimos de atención.
- Puede ayudar a ganar y mantener la confianza en el profesional.
Datos necesarios para el Consentimiento Informado
Estos son los datos que tienes que incluir en tu Consentimiento Informado:
- Datos personales (nombre, apellidos, DNI, dirección y teléfono) del paciente al que se le va a practicar el tratamiento. Si es menor de edad deben figurar los datos del tutor, madre o padre.
- Datos personales del profesional o profesionales que van a practicar la intervención.
- Tratamiento que se le va a practicar al paciente.
- Consecuencias previsibles que pueden aparecer durante y tras el tratamiento estético.
- Consecuencias inherentes que pueden aparecer durante y tras la sesión.
- Alternativas de tratamiento.
- Firma del consentimiento informado.
A la hora del paciente firmar el consentimiento informado, debemos elegir el momento adecuado de modo que el paciente pueda comprender toda la información que le vamos a aportar; debemos elegir el lugar adecuado preservando la intimidad del paciente y su confidencialidad; y debe realizarse sin prisas para que el paciente tenga lugar a meditar.
Conclusión sobre el Consentimiento Informado para centros de estética
Aunque exista una relación de confianza entre la esteticista profesional y el paciente, nunca se debe pasar por alto presentarle el Formulario de Consentimiento Informado, el cual debe estar muy bien elaborado e individualizado.
Las estadísticas indican que el uso de Consentimientos Informados en los centros de estética se está volviendo cada vez más común. Al informar claramente al paciente, las esteticistas lo ayudan a comprender los riesgos relacionados con un tratamiento determinado, así como sus derechos legales a la hora de decidir.
Aquí el paciente debe confirmar como verdaderos todos los hechos presentados ante el profesional, sin ocultar ninguna información, como otros procedimientos ya realizados, así como el uso de cualquier medicamento o sustancia. Y por parte de la profesional, presentar todos los riesgos para el paciente en detalle según el tratamiento o procedimiento adoptado, además de los posibles efectos secundarios.
Esperamos haber arrojado un poco más de luz sobre este asunto. Si quieres estar al día sobre temas de estética profesional como este, síguenos en las redes o consulta más información en el blog de Avanxel.