Alimentación y bienestar emocional
¿Qué relación existe entre la dieta y el bienestar emocional? Según los expertos, mucha. Y es que somos lo que comemos, y no sólo físicamente sino también mentalmente. Según la Academia Americana de Médicos de Familia, reducir el consumo de comida basura y elegir opciones más saludables ayuda a mantener el corazón sano, los músculos fuertes y un peso adecuado. Pero no solo eso, sino que también ayuda a nuestro estado de ánimo.
Los investigadores estudian ahora esta conexión ‘alimentación-estado de ánimo’, ya que quedan todavía muchas incógnitas en este terreno por desvelar. Los estudios son todavía limitados, aunque ya se apuntan evidencias que sugerirían que determinados nutrientes pueden contribuir al bienestar emocional.
Entre estos, destacan los ácidos grasos omega-3, que se encuentran en los pescados y mariscos, como el salmón, el arenque, las sardinas y la caballa. También pueden encontrarse en las semillas de lino, el aceite de semillas de lino y las nueces.
Por otra parte, el magnesio es un nutriente que ayuda al organismo a producir energía y a que los músculos, las arterias y el corazón funcionen correctamente. El magnesio se encuentra en alimentos como las verduras de hojas verdes, las nueces y los aguacates.
El ácido fólico y la vitamina B-12, por su parte, son vitaminas que desempeñan un papel importante en el metabolismo y en la producción de células sanguíneas. Según los expertos, aumentar los niveles de ácido fólico y vitamina B-12 de una persona puede aumentar su respuesta a los medicamentos que tratan la depresión. El ácido fólico se encuentra en alimentos como las verduras de hojas y las frutas, mientras que la vitamina B-12 se encuentra principalmente en el pescado, los mariscos, la carne y los productos lácteos.
Para tratar la depresión los especialistas investigan el triptófano, un aminoácido (parte constitutiva de las proteínas) que el organismo necesita para poder producir la serotonina, sustancia química que se encuentra en niveles bajos en las personas que tienen depresión. Los estudios han examinado el uso del triptófano para tratar la depresión, pero no hay suficiente evidencia científica para recomendar su uso en estos casos. El triptófano puede encontrarse en las carnes rojas, los productos lácteos, la soja y el pavo.
